COBALIOS. Genios malignos y engañosos de la comitiva de Baco, del cual eran a la vez guardias y bufones. Según Leloyer, los coba-lios, conocidos de los Griegos, eran unos demonios dulces y pacíficos, llamados por algunos, pequeños y buenos hombres de las montañas, porque se muestran bajo la figura de viejos enanos, de muy pequeña estatura: medio desnudos, las mangas arremangadas hasta los hombros y con un delantal de cuero atado en los ríñones.
“Esta especie de demonios son bastante chistosos y festivos; ya se les ve reir, ya divertirse entre sí, ya saltar de alegría y hacer mil boberías; ya imitar y contrahacer a los monos; o bien ya aparecen muy atareados aunque en realidad no hagan nada. Vése-les excavar en las minas de oro o de plata, amasar lo que sacan de ellas, y meterlo en cestos y otras vasijas preparadas para este objeto, tirar de la cuerda y de la garrucha para advertir los de arriba, y muy raras veces se les ve ofender a los operarios, sino son fuertemente provocados por pullas, injurias o escarnios y risotadas, de lo que se enojan muchísimo. Entonces arrojan primeramente tierra y piedrecitas a los azadoneros, y algunas veces los hieren… ¡Zape!…